La postura del perrito es una de las más populares en el mundo del sexo debido a su versatilidad y profundidad de penetración. Sin embargo, como cualquier otra postura sexual, puede causar incomodidad o dolor si no se realiza correctamente.
En esta guía exploraremos los beneficios sexuales de la postura a cuatro, así como los errores comunes que pueden provocar molestias. Además, explicaremos cómo hacer la postura del perrito correctamente para disfrutar plenamente de esta posición.
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5 razones para practicar la postura del perrito
Si se hace bien, ponerse en 4 para tener sexo tiene múltiples ventajas en cuanto a placer. Además, es una de las posiciones sumisas más escogidas a nivel mundial. ¿Por qué será? Pues bien, estas son las principales razones:
- Profundidad de penetración: la principal razón de practicar sexo a 4 es que la profundidad de penetración es máxima, intensificando el placer tanto de quien penetra como del que recibe.
- Estimulación profunda: debido a la penetración hasta el fondo, la posición en cuatro estimula directamente el punto G femenino, por lo que el orgasmo suele ser más intenso.
- Variedad de ángulos: ofrece la posibilidad de ajustar el ángulo de penetración, adaptándose a las preferencias y anatomía de cada miembro de la pareja.
- Control del ritmo: quien penetra en la postura del perrito tiene más control sobre el ritmo y la profundidad de la estocada. A su vez, la persona que recibe puede ir guiando según su comodidad.
- Versatilidad: puede incorporarse en diferentes dinámicas sexuales, como parte de una experiencia bondage o para practicar sexo anal, ya que el cuerpo se alinea de forma natural y la penetración es más fácil.
Qué errores causan dolor en la postura a 4
¿Sabías que la postura del perrito puede causar dolor abdominal a tu pareja? Si queréis disfrutar de una experiencia placentera a la hora de tener sexo a cuatro, es imprescindible evitar los siguientes errores frecuentes:
- Falta de comunicación. Entenderse mutuamente antes y durante el acto es básico. Por ello hay que mantener una comunicación abierta con la pareja sobre sensaciones, límites y ajustes necesarios.
- Ignorar la lubricación. Para evitar el dolor en la penetración profunda, reducir la fricción y aumentar el confort, sobre todo cuando se trata de sexo anal, es imprescindible utilizar algún lubricante.
- Ponerse en 4 incorrectamente. Aseguraros de mantener una alineación corporal adecuada: espalda recta, caderas alineadas y un apoyo cómodo en manos y rodillas. Para ello podéis utilizar una almohada.
Cómo hacer la posición del perrito sin molestias
Para disfrutar de la postura a 4 patas sin dolor, es fundamental seguir algunos consejos prácticos.
- Buscar una superficie cómoda. Hacerlo en la cama o en el sofá, así como colocar almohadas debajo de las rodillas o el abdomen puede aliviar la presión en las articulaciones y la espalda. Esto es especialmente útil para quienes prefieren hacer la pose del perrito suavemente.
- Ir despacio. Es importante no apresurarse en intensificar la penetración. Permitid que ambos cuerpos se ajusten, sobre todo si se trata de hacer la postura a 4 en el embarazo. Además, controlar el ritmo y la profundidad es clave para evitar movimientos que puedan generar incomodidad o molestias.
- Cambiar la alineación del cuerpo y el ritmo. Para reducir incomodidad en la postura sexual del cuatro, se puede inclinar el torso hacia adelante en lugar de apoyar las manos. Asimismo, colocar una almohada bajo la pelvis puede ajustar el ángulo de penetración.
Variantes de la postura del perrito para más comodidad
Existen otras variantes de la postura del perrito que implican cambiar la inclinación del cuerpo o utilizar algún objeto para ofrecer una mayor comodidad a la pareja. Estas son:
El sabueso
Esta postura a cuatro reduce la presión de las muñecas, la espalda baja y los hombros. Para ello, hay que adoptar la postura clásica del perrito, pero en vez de apoyar las manos, hay que bajar los antebrazos a la superficie de apoyo. Así, reduce la fatiga en los brazos y mejora la estabilidad del cuerpo.
El perrito lateral
Esta variante es para aquellas parejas que buscan mayor intimidad y menor esfuerzo físico a la hora de tener sexo en 4.
En esta, ambos se acuestan de lado en posición de cucharita, y la persona receptora adelanta ligeramente una pierna. La persona que penetra se acomoda detrás y ajusta el ángulo de penetración.
El perrito de pie
La postura del perrito de pie la utilizan aquellas parejas que buscan más control y una experiencia sexual a cuatro fuera de la cama.
Consiste en que la persona receptora se inclina hacia adelante, apoyando las manos contra la pared, una mesa o una encimera para tener estabilidad. Por su lado, la persona que penetra se coloca detrás y ajusta la altura, usando las piernas para estabilizarse.
La montaña mágica
Esta posición se recomienda para aquellas parejas que sienten mucha presión en las rodillas al tener sexo a cuatro o quieren una penetración más controlada.
En este caso hay que utilizar una o dos almohadas debajo del abdomen de la persona receptora, elevando ligeramente el torso. También, apoyar los antebrazos o el pecho para un soporte adicional. Por su lado, la persona que penetra puede ajustar la posición de las piernas, encontrando un ángulo más placentero.
La esfinge
Finalmente, esta variante de la postura del perrito se recomienda en aquellas personas que prefieren una penetración menos intensa.
La persona que recibe tiene que tumbarse completamente boca abajo y con las piernas estiradas. Puede mantener la cabeza apoyada sobre los brazos o levantar el torso ligeramente con los codos. De esta manera, la persona que penetra debe colocarse entre las piernas y controlar el ritmo, evitando una penetración profunda.
Disfruta de la posición en 4 con tu pareja
Como has visto, la postura sexual del perrito puede ser extremadamente placentera cuando se realiza correctamente. Y es que tener sexo a cuatro patas es muy versátil, porque se puede adaptar a diferentes preferencias en ritmos y ángulos, así como a cada tipo de cuerpo.
Poner en práctica alguna de las variables del perrito mencionadas puede ayudaros a encontrar la combinación perfecta entre comodidad y placer, evitando cualquier molestia o dolor. Eso sí, recordad que la clave es la comunicación en pareja y la disposición a ajustar la posición del perrito según las necesidades de ambos. No dudéis en seguir explorando hasta encontrar la versión ideal para ambos.
