El mundo de la sexualidad está lleno de prácticas diversas que invitan a las parejas a explorar su intimidad de nuevas maneras. Y una de las prácticas que ha ganado popularidad en los últimos años es el pegging.
Aunque profundizaremos en ello en las siguientes líneas, tienes que saber que esta práctica sexual implica que una mujer penetre a su pareja con un dildo atado a un arnés. Este tipo de sexo ha sido tabú durante mucho tiempo, pero cada vez más parejas encuentran en el pegging una forma de diversificar su intimidad y experimentar nuevos roles.
Si quieres conocer más sobre esta práctica, te invitamos a seguir leyendo. En este post te explicamos qué es y por qué se suele practicar el pegging, además de enumerar cómo practicarlo de forma segura y qué materiales se suelen utilizar.
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¿Qué es el Pegging? Significado
El pegging, o la penetración anal con arnés, se trata de una práctica sexual en la que la mujer utiliza un strap-on, es decir, arnés con un dildo, para penetrar analmente a su pareja masculina. Sin embargo, aunque se suele asociar a parejas heterosexuales, el pegging es un tipo de sexo que puede explorar cualquier pareja. Asimismo, esta práctica, que está muy rodeada de tabús, desafía las normas tradicionales de la dinámica sexual, permitiendo a las parejas explorar roles sexuales distintos.
El término «pegging» se popularizó en 2001 tras una encuesta realizada por el sexólogo Dan Savage.
En el caso de las parejas heterosexuales, los hombres experimentan sensaciones placenteras a través de la estimulación de la próstata. Una zona erógena que, cuando se estimula correctamente, puede llevar a orgasmos intensos. Además, es una práctica que fomenta la confianza y la comunicación dentro de la pareja, elementos esenciales para cualquier relación sexual satisfactoria.
Por qué practicar pegging
Existen diversas razones por las que las parejas deciden incluir el pegging en su vida sexual. Aquí van los motivos de más peso:
- Forma de diversificar el repertorio sexual y romper con la rutina. La curiosidad es un factor común, ya que muchos desean explorar nuevas formas de placer. Además, posturas pegging como puede ser la postura del perrito, pueden variar y permitir a la pareja experimentar diferentes ángulos y sensaciones.
- Manera de fortalecer la relación con la pareja a través de una comunicación abierta, la confianza y el establecimiento de límites claros.
- El deseo de explorar nuevas sensaciones. Los hombres que disfrutan de la estimulación anal a menudo lo hacen porque descubren que la próstata, a veces conocida como el «punto P«, puede proporcionarles un placer único.
- Jugar con la inversión de roles tradicionales, lo que supone una experiencia empoderadora y liberadora para ambas partes.
El pegging no tiene relación con la orientación sexual, ya que simplemente se trata de otra forma de placer.
¿Cómo hacer pegging? Consejos
Antes de practicar el sexo anal con arnés con una pareja, es importante seguir los siguientes consejos. De esta manera se podrá garantizar una experiencia cómoda y placentera durante el sexo con pegging. Toma nota:
Comunicación abierta y consentimiento
Antes de comenzar, hablad abiertamente vuestras expectativas, deseos y límites en el pegging. Sobre todo, es muy importante asegurarse de que ambos os sentís cómodos y respetados, dos de los pilares básicos de la ética en las relaciones sexuales.
Si es vuestra primera vez haciendo pegging, acordaros de utilizar una palabra clave de seguridad, como en la práctica de bdsm, para detenerse.
Elección del strap-on y dildo adecuados
Si es la primera vez, debes saber que existen diferentes tipos de strap-on o arneses sexuales para penetrar a tu pareja. Por ejemplo, algunos tienen vibración u otros tienen un ajuste más ergonómico.
Además, si sois principiantes, se recomienda utilizar un dildo de tamaño pequeño y flexible. A medida que ambos os sintáis más cómodos, podréis ir aumentando el tamaño gradualmente.
Uso de lubricante
La penetración anal requiere una mayor cantidad de lubricación, pues esta zona erógena no se lubrica por sí sola de forma natural. Por este motivo os recomendamos utilizar lubricantes a base de agua y de alta calidad, aplicándolo en el dildo y en la zona anal de la pareja para evitar fisuras e incomodidad.
Relajación y estimulación
La zona anal necesita tiempo para relajarse, así que los juegos previos son fundamentales. Se puede empezar con la estimulación externa y luego con los dedos o algún plug anal pequeño antes de la penetración con strap-on.
Asimismo, es fundamental que la persona que será penetrada se relaje y el proceso sea lento para que el cuerpo se adapte. Por lo tanto, no apresuréis la experiencia, ya que es importante que la persona penetrada se sienta cómoda en cada momento, permitiendo pausas si es necesario.
Juguetes sexuales que se utilizan en pegging
Para practicar pegging, necesitarás algunos juguetes y objetos específicos. Aquí te mencionamos los principales:
- Plugs anales: Antes de penetrar, los plugs anales suelen ayudar a preparar la zona anal, relajando los músculos y facilitando el proceso.
- Strap-on: El arnés para pegging es indispensable en este tipo de sexo anal. Los más recomendables son los ajustables, que permiten un mejor control durante la penetración y se adaptan a diferentes tipos de cuerpos.
- Dildo: Elige el que se ajuste al nivel de comodidad de ambos. Para principiantes, es mejor optar por uno de tamaño pequeño. También hay dildos con diferentes texturas y formas que pueden añadir variedad a la experiencia.
- Juguetes de doble estimulación: Existen strap-ons diseñados para que ambos miembros disfruten simultáneamente, proporcionando placer tanto a quien recibe como al que da. En algunos foros de pegging podrás leer recomendaciones de usuarios, que comparten recomendaciones sobre los mejores juguetes y experiencias relacionadas con este tema.
Conclusión: disfrutad del pegging con confianza
Como has podido leer, el sexo anal con arnés es una práctica sexual que os puede ofrecer a ti y a tu pareja nuevas formas de placer y conexión. Eso sí, es importante abordar el tema con comunicación, respeto y confianza.
Si es vuestra primera vez haciendo pegging, lo ideal es comenzar con juguetes pequeños, mucha lubricación y una mentalidad abierta a la hora de intercambiar roles. Y recordad: el pegging es otra forma más de experimentar y compartir placer.
